Subir, bajar, esfuerzo en la subida, esfuerzo y control en la bajada... Básicamente, recorrer la cuerda de una montaña, caminar permanentemente por la cumbre, consiste en eso.
Y claro, empiezo a sacar paralelismos... el primero que me viene a la cabeza es el de un electrocardiograma; el IBEX35... subidas, bajadas... la moral de la tropa... euforia, depresión...
Finalmente me doy cuenta de que vivimos en la cuerda. No necesariamente en la cuerda floja, aunque últimamente tengo mis momentos en que me siento un poco funambulista; la cuerda de la montaña, buena metáfora para la vida, tan exigente, tan desagradecida en general, tan maravillosa a veces cuando nos regala uno de esos momentos irrepetibles, que nunca te dejarán pase lo que pase...
Subir, bajar, esfuerzo, control, patinazo, esfuerzo, dolor, esfuerzo, gloria, dolor, alegría.
Y sí, como me dijeron hace poco, la vida es MUY dura; es dura de verdad. Pero con todo, y a pesar de todo, la vida es también maravillosa, plagada de pequeños momentos que llenan cualquier vacío.
¡Ea!
PD: Podéis pulsar en la foto para verla más grande.